sábado, 3 de octubre de 2009

El haz del alma

En este sendero sólo he visto La fachada,
y fui perdiendo el tacto,
por mis ojos pasaron miles de razas y
sus rostros... pero jamás había visto
el rostro del alma
Que dejando sus huellas imborrables
se brinda insolente, y en silencio, 
se trepa a mi ser.
Jamás había cerrado mis ojos
Para sentir el placer que brinda el tacto,
Hoy los cierro por vos.
Jamás de mi boca salió un suspiro
De aliento a otro ser, hoy  
quiero dartelo a vos.
Jamás había mostrado mi corazón,
Temía que roben mi alma,
Hoy quiero dártela a vos.


             TERRA

No hay comentarios.:

Publicar un comentario